La unidad de transmisión es el corazón de todo montacargas para construcción, ya que genera la fuerza para mover las piezas del elevador durante su ascenso y descenso. El sistema de transmisión de potencia se compone normalmente de un motor electromagnético para el freno, reductor de engranajes, placa de montaje del motor, bastidor del motor y otros elementos. Con una carga de 1 a 3 toneladas, la unidad de accionamiento proporciona una velocidad de 1 a 60 m / min.

El rendimiento y la calidad del sistema afectan directamente la eficiencia de trabajo del elevador. Es por ello que se necesitas de las mejores piezas para construir esta unidad.

Si alguna vez tienes la oportunidad de estar en un sitio de construcción o en una fábrica de elevadores para obras en China, lo más probable es que éstos utilicen la unidad de transmisión de Jingya. Esta presencia es el testimonio tangible del rendimiento y calidad de nuestros accesorios y repuestos para elevadores de construccion. Utilizamos equipos de alta precisión para la fabricación, montaje y prueba de cada sistema de accionamiento antes de enviarlo al cliente.

La experiencia en la fabricación y ejecución de pruebas se traduce en la oferta de motores, reductores de velocidad y sistemas de seguridad fiables y rentables. Nuestra buena reputación se debe sobre todo a la capacidad para satisfacer las más exigentes demandas de los clientes. Proveemos nuestras unidades de transmisión con una variedad de configuraciones, pueden montarse de forma horizontal o inclinada, pueden ser de tipo individual, doble o triple, y pueden montarse con reductores de velocidad de husillo sin fin o de engranajes cónicos.

Al momento de instalar el conjunto de transmisión directamente en la cabina del ascensor, se necesitan conectores o elementos de fijación. Normalmente se utiliza una chapa de unión con un agujero para la inserción de un pasador grande; una conexión fija rígida que facilita la instalación y mantenimiento, pero transfiere una gran fuerza de impacto a la cabina causando un molestoso ruido y afectando la estabilidad general durante el arranque y frenado.

Teniendo en cuenta las muchas desventajas de una conexión rígida, hemos desarrollado una conexión flexible que permite el ajuste fácil a lo largo de los ejes X, Y, Z, y que impide la distribución desigual de la carga que podría provocar el acoplamiento inadecuado de los engranajes y consecuentemente la resistencia al movimiento del elevador. Asimismo, la conexión flexible reduce al mínimo el consumo de energía y de los impactos durante el arranque y la parada.

Las diversas unidades de transmisión tienen diferente eficiencia de transmisión de potencia, a saber: 2×11kw, 2×15kw y 3×11kw. Anteriormente, casi todos los sistemas de accionamiento serie SC disponibles eran unidades de triple transmisión, aunque también habían modelos de doble transmisión y modelos con contrapesos. Ahora, nuestros sistemas de doble transmisión no utilizan contrapesos, pero cuentan con un variador de frecuencia para el ajuste de velocidad. Tanto los sistemas de doble y triple transmisión tienen sus pros y sus contras, pero ambos ahorran energía y permiten controlar el par de arranque. Algunos sistemas de doble accionamiento no pueden usarse con cargas pesadas, y se tiende a creer que la triple transmisión es mejor que la doble ya que tiene un motor más, pero esto es no es así exactamente. La unidad triple pierde hasta el 40% de su potencia a través del reductor de tornillo sin fin durante la transmisión, en consecuencia la unidad de 11kw sólo proporciona 11KW × 3 × 60% = 19.8kw de potencia.

En cambio, el sistema doble ofrece una mayor eficiencia de transmisión gracias al funcionamiento conjunto de los engranajes de dientes rectos y helicoidales. Durante la operación habitual de frenado, esta unidad suministra una eficiencia del 95%. Si por ejemplo la unidad de transmisión produce 13 kW de potencia, su potencia será 13KW × 2 × 95% = 24.7KW. Por tanto, podemos deducir que la unidad de doble transmisión es más segura y más potente que la de triple transmisión. En cuanto a consumo de energía, la primera ahorra un 30% más, es fácil de mantener y dura más que la segunda. Debe escogerse el sistema adecuado tomando en cuenta los hábitos del operario, la instalación y la facilidad de mantenimiento.